Clara y la sirenita Teles

Amiguitas y amiguitos, mi nombre es Clara, y voy a contaros una historia que me ocurrió cuando tenía 7 años.
Estaba en una playa casi desierta donde llevaba a pasear y bañar a mi mascota, una preciosa perrita a la que la pusimos de nombre Luna, porque era tan blanca y redondita que parecía una luna llena.
Mis padres y mis tíos, se quedaban en otra parte de la playa charlando mientras yo jugaba con Luna a coger las olas.
Una de las tardes de juego, Luna y yo vimos algo que brillaba en la orilla, pero no se movía fuimos corriendo a ver que podía ser ¡Y la sorpresa fue impresionante! Era una pequeña sirena herida que no podía volver al mar , la llevamos un poco más hacia la arena y le preguntamos como se llamaba, se llamaba Teles que significa perfecta.
Al ver su herida nos asustamos y le pedimos que no que iba a buscar a los mayores para curarla. Ellos llegaron enseguida con el botiquín de emergencia que siempre llevan en el coche y rápidamente se pusieron manos a la obra para curarla.
Mientras tanto; ella con las pocas fuerzas que tenía nos fue contando su historia, su familia y como resulto herida.
Su casa estaba en el fondo del mar entre algas y pececillos con los que jugaba cuando salía del cole, si, en el mar también hay cole, pero hoy al salir del cole no pudo jugar con ellos porque un pez araña le persiguió hasta que no pudo nadar mas y se hirió con una roca y nos contó que su familia era: Su papá, su mamá, y dos hermanas mayores que ella.
Mientras tanto terminaron de curar sus heridas y decidimos que debíamos enviarla de nuevo al mar para que se reuniera con su familia, pues debían estar preocupados.
Teles nos agradeció por lo que habíamos hecho por ella y qué nunca nos olvidaría...
Pasaron los años, Luna ya no estaba con nosotros pero yo volvía a aquella playa para recordar la aventura que habíamos pasado con Teles.
Estaba tumbada en la playa tomando el sol, cuando de pronto sentí que alguien acariciaba mi pelo, cuando abrí los ojos ¡Era Teles! Me dijo que todos los veranos venía a ver si nos veía, que nunca se olvido de nosotros y de como le salvamos la vida. Que su familia nos mandaba recuerdos y agradecían su vuelta a casa por nuestra acción.
Acordamos intentar acudir a esa playa siempre que fuera posible y sellamos nuestra amistad para siempre.
¿Esto fue un sueño o una realidad? ¿Vosotros que creéis?
FIN
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Comentarios
Es un cuento precioso.
Yo pienso que lo que nos cuentas ocurrió y seguro pasaste un verano inolvidable.
Un abrazo enorme.